La planta de las chufas es imprescindible para cuidar del organismo. Así, se ha determinado que son especialmente eficaces frente a las digestiones pesadas y afecciones del tubo digestivo.
¿Por qué son las chufas imprescindibles para una digestión favorable y vida sana?
Ya desde el Antiguo Egipto, este tubérculo se utilizaba como remedio para poder apaciguar las alteraciones estomacales.
De por sí, es un alimento con grandes propiedades antiinflamatorias y que puede ayudar en la irritación de la mucosa gástrica e intestinal. Por eso, la chufa es muy utilizada para calmar diversos grados de gastritis, reflujo y dispepsia. Asimismo, su alto contenido en fibra mejora el paso del bolo alimenticio a través de las mucosidades intestinales, sin producir lesión alguna.
La chufa contiene unas enzimas que se encargan de digerir los componentes de los alimentos. Concretamente, la amilasa y lipasa, encargadas de proporcionar una mayor velocidad a la digestión.
Concretamente, las amilasas van a encargarse de recortar los hidratos de carbono en estructuras más pequeñas y simples. Las lipasas harán lo mismo con las grasas. De este modo, se asimilan mejor los nutrientes y se incorporan más fácilmente al organismo. Además, este alimento también puede estimular la circulación sanguínea en todo el cuerpo. Con esto, es más fácil que se eliminen toxinas y se transporten los nutrientes necesarios para el funcionamiento adecuado.
¿Qué más beneficios aporta para una vida saludable?
La fibra también va a ser la responsable de que el bolo fecal se forme adecuadamente, mejore el tránsito intestinal y se propicie un microbioma beneficioso. Es una inhibidora de las flatulencias, por lo que ayudará a disminuir la hinchazón y el dolor de vientre causados por los gases.
Las chufas van a ayudar a mejorar la función digestiva y pueden aportar una mayor saciedad a la persona. Además, son muy recomendadas para evitar gases e incluso úlceras estomacales.